el mundo nos quiere rápido para que lleguemos a tiempo

Levántese a las siete en punto,
desayune un café rápido y una tostada a medio hacer en la cocina (no se siente).
Baje deprisa las escaleras de casa,
coja el metro,
colóquese a la derecha (sino quiere morir atropellado por los de la izquierda).
Suba, baje, suba, dese prisa, mucha prisa que no llega,
¡malditas escaleras!, los incas no tuvieron que subir tantas escaleras para llegar a sus pirámides,
¡qué injusticia!, si se muere de desnutrición por ir a la oficina demande a su jefe.
No fume, no hay tiempo, el tiempo es oro.
¡Faltan 20 minutos para las 15.00!, no tarde tanto en comer, no hable tanto, siga.
¿Acabó de revisar los expedientes?,
¿no?, ¿cuántos le quedó?, ¿cuántos?.
Regrese inmediatamente.
Debería darle vergüenza la gente que se muere en la calle buscando trabajo
y usted se permite el lujo de poner su puesto al borde del abismo.
¡Vaya insensatez!, ¡qué descaro!
Compre,
gaste,
necesita una televisión de plasma con tdt incorporado
y el último modelo de móvil 3G tecnología punta...


Y así hasta los 67 años


...como contemplar el constante goteo de muerte sobre el salpicadero,
como la cirrosis hepática de un alcohólico que se negó a reconocer que sucumbió al encanto de los vapores etílicos.

Comentaris

Anònim ha dit…
http://www.pueblosabandonados.es/
Anònim ha dit…
http://www.pueblosabandonados.es/

Entrades populars